Terremotos Mas Importantes en Argentina y Cómo actuar Frente a un Sismo
Los terremotos tienen lugar porque las placas tectónicas se encuentran en constante movimiento y, por lo tanto, chocan entre sí, se deslizan unas contra otras y, en algunos casos, se superponen.
La corteza terrestre no refleja todos los movimientos que le suceden, pero acumula la energía que se desprende de ellos dentro de sus rocas hasta que ya no pueden soportar más la tensión.
En ese punto, la energía es liberada a través de los lugares más débiles de la corteza terrestre, haciendo que el suelo se mueva repentinamente, originándose un terremoto.
Terremotos y áreas de riesgo sísmico en la Argentina
Para muchas personas, los terremotos son extraños fenómenos que sólo ocurren en regiones alejadas del planeta.
Sin embargo, nuestro país tiene una larga historia de movimientos sísmicos, en especial en las regiones centro-oeste y noroeste, donde se registra la mayor actividad.
Incluso en zonas de bajo riesgo han tenido lugar movimientos sísmicos, como el que ocurrió el 5 de junio de 1888 cuando la Ciudad de Buenos Aires se vio afectada por un terremoto que tuvo su epicentro en el Río de la Plata.
Algunos de los movimientos sísmicos ocurridos en nuestro país han sucedido en zonas alejadas de las grandes ciudades y poco pobladas, quizá por eso se les haya dado muy poca difusión.
En el siglo pasado, el 20 de marzo 1861, un terremoto de gran intensidad destruyó por completo la ciudad de Mendoza dejando gran cantidad de muertos y causando también numerosos daños a la ciudad de San Juan.
Sin embargo, éste no fue ni el primero ni el último de los grandes terremotos.
Una de las mayores catástrofes ocurridas en nuestro país fue causada por el terremoto de San Juan, el 15 de enero de 1944.
La actividad sísmica afectó a la ciudad capital y a sus alrededores.
En ese entonces, en aquel lugar vivían unas 90.000 personas.
El terremoto dejó un saldo de más de 10.000 muertos, el 80 % de la ciudad quedó en ruinas, las viviendas destruidas y los edificios públicos y puentes transformados en escombros.
Como respuesta a esta terrible catástrofe, el gobierno nacional decidió crear un organismo denominado «Consejo de Reconstrucción de San Juan», el cual dependía del Poder Ejecutivo Nacional.
Entre las funciones del organismo figuraba la de elaborar un código de edificación para la provincia de San Juan, tendiente a que todas las construcciones fueran resistentes a los sismos, o sismorresistentes.
Dicho organismo también debía controlar que se cumplieran las reglamentaciones que el código establecía para las construcciones.
PRINCIPALES TERREMOTOS OCURRIDOS EN ARGENTINA
13 de septiembre de 1692
Poblado de Talavera del Estero, en Salta, y ciudad de Salta
22 de mayo de 1782
Ciudad de Mendoza
4 de julio de 1817
Ciudad de Santiago del Estero
19 de enero de 1826
Región de Trancas, Tucumán
20 de marzo de 1861
Ciudad de Mendoza
14 de enero de 1863
San Salvador de Jujuy
9 de octubre de 1871
Ciudad de Oran, Salta
6 de julio de 1874
Ciudad de Oran, Salta
5 de julio de 1888
Centro del Río de la Plata, Ciudad de Buenos Aires y Montevideo
2 7 de octubre de 1894
Noroeste de San Juan; afectó a toda la provincia y causó daños menores en Catamarca, Córdoba, San Luis y Mendoza
11 de agosto de 1907
Localidades de Montero y La Cocha, Tucumán
17 de diciembre de 1920
Noreste de Mendoza
30 de mayo de 1929
Localidades de Villa Atuel y Las Malvinas, sur de Mendoza
11 de junio de 1934
Localidad de Sampacho, al sureste de Córdoba
15 de enero de 1944
Destrucción de la ciudad de San Juan
17 de diciembre de 1949
Tierra del Fuego
19 de noviembre de 1973
Este de Salta y de Jujuy
17 de agosto de 1974
Localidad de Oran, Salta
23 de noviembre de 1977
Ciudad de Caucete, San Juan, y toda la provincia en general
26 de enero de 1985
Departamentos de Godoy Cruz y Las Meras, Mendoza, y Gran Mendoza en general
8 de junio de 1993
San Juan y Mendoza
RECOMENDACIONES FRENTE A UN SISMO ANTES DE UN SISMO:
Establecer un plan de emergencia sísmica para el lugar.
Ubicar y señalizar zonas seguras o libres de riesgo.
Designar responsables para cortar los servicios de agua, gas, luz y otros suministros.
Disponer de luces de emergencia, linternas y radio a transistores.
Verificar periódicamente el funcionamiento de puertas y portones.
Señalizar y mantener libre de obstáculos las vías de escape.
Establecer un plan de emergencia familiar.
Participar activamente del funcionamiento del Plan de Emergencia Sísmica.
• DURANTE UN SISMO
Tener calma y proceder de acuerdo con lo establecido en el plan de emergencia.
No permanecer en lugares donde existan objetos cuya caída pueda provocar accidentes.
No salir a balcones bajo ninguna circunstancia y no usar ascensores.
Si se encuentra en un lugar con aglomeración de personas (autoservicios, templos, cines, etc.), permanecer en el lugar y aplicar las medidas de protección.
No acudir inmediatamente a la salida.
Ser solidario con los semejantes frente a la emergencia.
• DESPUÉS DE UN SISMO
Intentar resolver los problemas inmediatos, pues la ayuda puede tardar en llegar.
Los terremotos tienen lugar porque las placas tectónicas se encuentran en constante movimiento y, por lo tanto, chocan entre sí, se deslizan unas contra otras y, en algunos casos, se superponen.
La corteza terrestre no refleja todos los movimientos que le suceden, pero acumula la energía que se desprende de ellos dentro de sus rocas hasta que ya no pueden soportar más la tensión.
En ese punto, la energía es liberada a través de los lugares más débiles de la corteza terrestre, haciendo que el suelo se mueva repentinamente, originándose un terremoto.
La Erupción del Volcán La Soufriere:
Situado en la isla de Guadalupe, océano Pacífico nordoriental.
Ocurrida el 17 de agosto de 1976, obligó a evacuar 72.000 habitantes de las zonas aledañas, en previsión de un maremoto anunciado por el equipo de científicos que trabajaba en Point a Pitre, y que por fortuna no se produjo.
La explosión se escuchó a más de 15 km de distancia y la mayor cantidad de víctimas estuvo representada por habitantes que, pese a los avisos y exhortaciones de las autoridades, se negaron a abandonar sus viviendas.
Jaurías de perros erraban buscando alimentos en medio de las poblaciones desiertas y sus lúgubres aullidos sólo eran oídos por las brigadas de salvamento que recorrían la zona.
El doctor Robert Brouyse, catedrático de la universidad de París y iefe del equipo de vulcanólogos. realizó un vuelo en helicóptero sobre el pico del volcán, a 1.468 m de altura, envuelto en una densa nube de gases sulfurosos.
En previsión de que se reanudaran las erupciones, el dispositivo de seguridad quedó montado largo tiempo.
Goetz Buchbinder, sismólogo, declaró que según sus estudios la erupción del volcán La Soufriere obedeció al movimiento de la Placa Atlántica, que se halla debajo de la Placa del Caribe.
Cuando una placa se mueve, la que se encuentra en la posición inferior termina por fundirse, pues la presión la envía a regiones más profundas.
A consecuencia de estos movimientos candentes, la lava sale a través de la zona de fractura.
• LAS ONDAS SÍSMICAS:
Durante el terremoto se producen tres tipos de ondas sísmicas.
Las ondas primarías o longitudinales se deben al efecto de compresión y expansión de las rocas próximas al hipocentro, y se transmiten en todas direcciones.
Son éstas las ondas sonoras, que viajan más rápidamente que las restantes, y las cuales producen los grandes ruidos o truenos sísmicos que se escuchan, a veces, antes de que se produzca la sacudida del terremoto en la superficie terrestre.
Las ondas secundarias viajan transversalmente por la corteza terrestre y como son más lentas que las primeras, son registradas después por los sismógrafos. Estas ondas producen sacudidas de la litosfera.
Las ondas largas o superficiales son las últimas registradas por el sismógrafo, ya que se mueven mucho más lentamente que las anteriores.
Se producen al llegar las ondas secundarias a la superficie y pueden propagarse a toda la circunferencia terrestres. Son también las más destructivas.
El estudio de los sismógrafos, ha permitido aumentar nuestros conocimientos sobre la estructura de nuestro planeta.
La propagación de las ondas sísmicas en el interior de la tierra indica que el planeta en cuya superficie vivimos está constituido por capas de distinta densidad.
Se ha comprobado, por ejemplo, que las ondas largas, que viajan a unos 3.2 Km. por segundó en la superficie de los continentes, se propagan más rápidamente a través de los fondos oceánicos, la cual prueba que bajo los océanos la litosfera está formada por material más denso (sima).
Las ondas primarias y secundarias atraviesan los primeros 2.900 Km. a una velocidad que aumenta con la profundidad, lo cual prueba que esta zona es sólida, pues las ondas secundarias no atraviesan los líquidos.
A partir de los 2 900 Km. las ondas secundarias no siguen propagándose y las primarias pierden la mitad de su velocidad, lo que indica un cambio en la composición del núcleo central de la tierra, que debe estar constituido de un material distinto (níquel y hierro, según se cree).
En los últimos años se ha venido aplicando el principio del sismógrafo a descubrir la estructura de la litosfera, para determinar la existencia de áreas que indiquen la posibilidad que contengan depósitos de minerales.
Este sistema de exploración se utiliza especialmente en la búsqueda de petróleo.
EFECTOS DE LOS TERREMOTOS:
De todos los fenómenos naturales ninguno aterroriza mas que el de los terremotos.
Afortunadamente la gran mayoría de los mismos se producen en el fondo del oceánicos (maremotos9 o en regiones deshabitadas.
Los terremotos pueden ocasionar cambios en el relieve, grietas externas, deslizamientos y avalanchas, variaciones en los cursos de lo ríos y otros fenómenos igualmente impresionantes.
Los efectos más desastrosos de los terremotos se producen en las áreas densamente pobladas.
En 1923, un terremoto sacudió la isla de Honshu, en el Japón.
Este sismo, cuya intensidad se prolongó apenas 16 segundos, afectó una zona donde vivían más de siete millones de habitantes y destruyó más de 450 000 edificios en las ciudades de Tokio y Yolcohama, matando más de ciento cincuenta mil personas.
Los incendios que se produjeron por los cortocircuitos del tendido eléctrico no pudieron ser combatidos eficazmente por la falta de agua, ya que el sismo había dislocado las tuberías de los acueductos.
Igualmente fueron destruidas las vías férreas y aun las carreteras.
Cuando los terremotos se producen en los fondos oceánicos o cerca de las áreas costeras pueden dar lugar a grandes desastres, al originar grandes olas, llamadas tsunamis en japonés.
Una de estas olas se abatió sobre Lisboa, la capital portuguesa, una hora después de un fuerte terremoto, en 1755, y fue la causa principal de la muerte de unas sesenta mil víctimas, que produjo el sismo.
Entre otros grandes terremotos, registrados en el presente siglo, figuran el de San Francisco, California, en 1906, el cual causó la destrucción de la ciudad, por los grandes incendios que lo siguieron, y originó más de setecientas muertes.
La ciudad de Messina, en Italia, fue destruida, en 1908, perdiéndose más de cien mil vidas. En siglos anteriores se registraron en la India terremotos muy destructivos, en uno de los cuales perecieron trescientas mil personas.
En la América del Sur se han registrado terremotos muy violentos, especialmente en Chile, donde la ciudad de Valparaíso na sido destruida en varias oportunidades.
En la América Central Kan destruido los terremotos varias veces la Ciudad de Guatemala y a Cartago, Costa Rica.
La ciudad de San Salvador, capital de la República de El Salvador, ha sufrido muy fuertes terremotos y es raro la semana en que no se registran en ella microsismos, al punto de ser denominada la zona en que está enclavada «Valle de las Hamacas».
En la isla de Jamaica, un terremoto causó 1000 víctimas en 1907.
La ciudad de Santiago de Cuta ha sido sacudida por numerosos macrosismos o temblores de tierras desde su fundación, pero los terremotos intensos han sido escasos afortunadamente.
Estos terremotos se producen por el desplazamiento de los bloques fallados de la corteza terrestre en la Fosa de Barlett, situada al sur de Cuba.
El último terremoto violento, que causó grandes daños materiales y algunas víctimas, ocurrió en Santiago en el mes de febrero de 1932.
Aunque hasta hoy no ha podido la investigación científica anticipar la ocurrencia de los terremotos, lo cual algunos sismólogos consideran una posibilidad futura, los daños provocados por los terremotos se han aminorado considerablemente con la construcción de edificios más resistentes.
Se sabe, por ejemplo, que las construcciones levantadas sobre rocas firmes resultan menos afectadas que las edificadas sobre cimientos poco profundos y en rocas no consolidadas.
También los edificios de estructura de acero o aquellos de estructura sólidamente entramada, resisten mejor los efectos de los sismos.
TABLA I, LOS PEORES TERREMOTOS DE ESTE SIGLO XX:
AÑO
LUGAR
MAGNITUD
MUERTES
1906
San Francisco E. U. A.
8.3
700
1908
Italia
7.5
83.000
1920
China
8.6
180.000
1923
Japón
8.3
99.000
1927
China
8.3
200.000
1931
Nueva Zelandia
7.9
255
1932
China
No se sabe
70 000
1935
Paquistán
7.5
20 a 60.000
1952
California E.U.A
7.7
11
1962
Chile
8.5
4 a 5.000
1964
Alaska
8.5
178
1968
Irán
7.4
12.000
1970
Perú
7.7
70.000
1976
China
7.8
242.000
1978
Irán
7.7
15 .000
1979
Ecuador
7.9
600
1980
Argelia
7.7
3.500
1980
Italia
7.2
3.000
1981
Irán
7.3
2.500
1983
Japón
7.7
58
1983
Turquía
7.1
1.300
1985
Chile
7.4
177
1985
México
8.1
4.287
1988
Armenia
7.0
25.000
Conociendo la intensidad de las ondas de choque de un terremoto, se ruede determinar su magnitud, que es la cantidad de energía liberada en su epicentro. Se mide en la escala de Richter —de 1 a 10 grados—, creada por el sismólogo estadounidense Charles Richter en 1935. La escala es logarítmica; un sismo de 8 grados es 10 veces más intenso que uno de 7, 100 veces más intenso que uno de 6, etc.
————- 00000 ————
La escala más popular: Nacido en 1900 en Hamilton (Ohio), Charles F. Richter estudió física en la Universidad de Stanford, en California, y desde 1927 , hasta su jubilación trabajó en el Laboratorio Kresge de la Institución Carnegie, en Pasadena, más tarde convertido en el Seismological Laboratory (Laboratorio de Sismología) dependiente del Instituto de Tecnología de California.
Allí se inició Richter, primero como asistente de investigación, junto a renombrados colegas como Beno Gutenberg y Hugo Benioff.
El laboratorio de sismología en Caltech tenía la intención de emitir informes periódicos sobre los terremotos en el sur de California, por lo que Richter y Gutenberg se abocaron a esa tarea.
La pareja de científicos empezó a pensar cómo diseñar una tabla segura y confiable que midiera los cientos de temblores que se producen al año.
Hasta entonces, la única forma de evaluarlos era mediante una escala que había desarrollado Giuseppe Mercalli en 1902.
Esta escala clasifica los terremotos del 1 al 12, dependiendo de cómo los edificios y la gente responden ante el temblor.
Así por ejemplo, una sacudida que balancea las lámparas del techo se clasificaba con una magnitud de 1 y 2, mientras que otro seísmo que destruye grandes edificios se clasifica de magnitud 10.
La escala desarrollada por Richter y Gutenberg, que luego se reconocería sólo como la escala de Richter, proporcionaba datos más certeros.
La forma de construcción de esta escala fue el resultado de varias observaciones; de tener en cuenta que el comportamiento de la amplitud máxima registrada por un sismógrafo depende de dos causas: la distancia entre el foco y el aparato y, además, de algo intrínseco del temblor.
Así por ejemplo, un terremoto de magnitud 3 es aquel que a una distancia de 100 km imprime en un sismógrafo una amplitud máxima de un milímetro.
Es decir que el tipo de observación -una amplitud-permite relacionarlo de forma directa con la energía, por lo que puede decirse que la magnitud es una forma simplificada de cuantificar la energía liberada.
• Otras pasiones:
Richter, que estuvo casado con una maestra, también disfrutaba de la música clásica, la lectura de ciencia ficción y la poesía.
Entre los papeles privados que a su muerte en 1985, fueron donados al archivo del Caltech, había un gran número de poemas, escritos a lo largo de su vida.
Sólo algunos de ellos llegaron a ver la luz en revistas literarias de escasa circulación.
• TABLA II
TERREMOTOS MAS IMPORTANTES DESDE LA ERA CRISTIANA
Fecha
Lugar
Efectos
79
518
586
1268
1290
1531
1541
1556
1737
1755: 1° noviembre
1883: 26/28 agosto
1891: 28 octubre
1902: 8 mayo
1906: 18 abril
1908: 28 diciembre
1920: 16 diciembre
1923: 1° setiembre
1935: 31 mayo
1939: 24 enero,
1939: 27 diciembre
1944: 15 enero
1949: 5 agosto
1950: 15 agosto
1954: 9 setiembre
1958: 26 julio
1960: 29 febrero
1962: 1° setiembre
1970: 31 mayo
1972: 23 diciembre
1975: 6 setiembre 1976:
1976 4 febrero
1976: 17 agosto
Pompeya (Italia)
Skupi (Yugoslavia)
Corinto (Grecia)
Sicilia (Italia)
Chii (China)
Lisboa (Portugal)
Guatemala
Shen-Si (China)
Calcuta (India)
Lisboa (Portugal)
Indias Neerlandesas
Japón
Martinica
California (EE.UU.)
Mesina (Italia)
Kansu (China)
Japón
Quetta (India)
Chile
Turquía
San Juan (Argentina)
Ecuador
India
Argelia
Skopje (Yugoslavia)
Marruecos
Irán
Perú
Managua
Turquía
Guatemala
Filipinas
Destrucción total de la ciudad.
Causó más de 40.000 muertes.
Cerca de 45.000 muertes. Hubo alrededor de 65.000 muertos.
100.000 muertes, aproximadamente.
Ocasionó 30.000 muertes.
Destrucción de la ciudad. 850.000 muertes.
Causó cerca de 30.000 muertes.
Arrasó la ciudad y arrebató 60.000 vidas humanas.
La explosión del volcán Rakata destruyó dos tercios de la isla de Krakatoa. Ocasionó 36.000 muertes.
Afectó a Mino y la bahía de Ise. Destruyó 2.000 casas y produjo 7.500 muertes.
La erupción de Mont Pelee arrasó la ciudad de Saint-Pierre. Mató 40.000 personas.
Causó incendios devastadores en San Francisco. Costó 1.500 vidas. Destruyó Mesina y Reggio, ocasionando 85.000 muertos.
Causó grandes deslizamientos de tierra y produjo 100.000 víctimas. Destruyó Yokohama y gran parte de Tokio. Murieron 95.000 personas.
Asoló esta ciudad, hoy de Pakistán, y ocasionó 50.000 muertes.
Devastó 130.000 km2, destruyó Chillan y produjo 30.000 muertos. Destruyó la ciudad de Erzincan y ocasionó 100.000 muertes. Destruyó la .ciudad capital. Causó más de 10.000 muertes. Arrasó 50 poblaciones y causó 6.000 muertos.
Afectó a la provincia de Assam y perdieron la vida 30.000 personas.
Afectó el Norte del país y produjo 1.600 muertes.
Arruinó esta ciudad y ocasionó más de 1.000 víctimas.
Destruyó Agadir y mató más de 20.000 personas.
Asoló una zona de 20.000 km2 al oeste de Teherán. Produjo unos 10.000 muertos.
Devastó el departamento de An-cash y destruyó 250 poblaciones, entre ellas Yungay. Causó 50.000 muertes.
Arrasó las tres cuartas partes de esta ciudad y ocasionó cerca de 20.000 muertos.
Causó alrededor de 3.000 muertes. Más de 24.000 muertos.
Aproximadamente 2.000 muertos.
Fuente Consultada: Gran Atlas de la Ciencia National Geographic.