Los Bienes de Eva Duarte de Peron Fundacion Eva Duarte de Perón
Los Bienes de Eva Duarte de Perón
Eva Perón había nacido en una familia pobre. Cuando llegó a Buenos Aires a ganarse la vida como actriz no tenía un centavo. ¿Cómo hizo, entonces, para obtener los bienes que figuran en su testamentaria?
Desde Asunción, Paraguay, a poco menos de un mes de haber sido derrocado, el general Juan Domingo Perón se refirió a su patrimonio en declaraciones a la agencia de noticias, United Press. Llama la atención la cantidad de bienes que le atribuye a la herencia de Eva Perón:
‘Mis bienes son bien conocidos: mi sueldo de Presidente, durante mi primer periodo de gobierno, lo doné a la Fundación Eva Perón. Los sueldos del segundo período los devolví al Estado. Poseo una casa en Buenos Aires que pertenece ami señora, construida antes de que yo fuera elegido por primera vez.
Tengo también una quinta en el pueblo de San Vicente, que compré siendo coronel y antes de soñar siquiera que sería Presidente Constitucional de mi país.
Poseo además los bienes, que por la testamentaria de mi señora me corresponden, y que consisten en los derechos de autor del libro La razón de mi vida, traducido y publicado en numerosos idiomas en todo el mundo y un legado que don Alberto Dodero hizo en su testamento a favor de Eva Perón.
Además, los numerosos obsequios que el Pueblo y mis amigos me hicieron en cantidad que justifica mi reconocimiento sin límites. El que descubra otro bien, como ya lo he repetido antes, puede quedarse con él”.1
Evita había llegado a Buenos Aires en 1935. Dos años después la contrataban para representar papeles menores en algunas compañías de teatro, como la de Píerina Dealessi que fue quien e enseñó a declamar en el escenario. Muchos tiempo después, la actriz aseguró que por ese tiempo, “Evita pasaba hambre, era desgraciada y no se cuidaba; tenía las manos frías y sudadas, acudía temprano al teatro porque en él se estaba más caliente que en su habitación, y no podía ir a ningún otro sitio. Cobraba sólo ciento ochenta pesos al mes, y enviaba una parte a su familia de Junín”.2
En 1939, Eva Duarte había iogrado triunfar. En abril se formó una nueva compañía de teatro radiofónico en la que compartió cartel con Pascual Pelliciotta, y fue una de las principales figuras de Radio "El Mundo". Un año después, trabajó en cine en dos papeles secundarios. En 1943, tenía su propia compañía, era una de las actrices radiofónicas mejor pagadasy ganaba entre cinco y seis mil pesos mensuales. Con este dinero compró un petit hotel en la calle Teodoro García 2102, de la Capital Federal.
En cuanto a los derechos de autor, la casa Jacobc Peuser S.A. dio cuenta a la Comisión Investigadora de 1956 que se imprimieron 1.388.852 ejemplares de La razón de mi vida, y que “el producto de la venta se transfería a la autora por liquidaciones periódicas, previa deducción del costo de impresión y papel empleado.3
Sobre las joyas y otros objetos que Evita recibía como “regalos de los amigos”, en diciembre de 1956 se realizó una subasta de distintos objetos pertenecientes al matrimonio Perón en la que se vendieron joyas, zapatos y vestidos. En 1958 tuvo lugar otro remate. Lo recaudado pasó a una cuenta de la Presidencia denominada “Enajenación de bienes”, pero nunca se supo el destino de ese dinero. Treinta años más tarde, en 1986, un proyecto del Senado de la Nación dispuso que muchos de los objetos que aún permanecían en custodia en el Banco de la Ciudad de Buenos Aires pasaran a dependencias del Museo Histórico Nacional.
Otra cuestión son los bienes que Alberto Dodero legó a Evita. ¿Qué vínculo los unía para que el empresario naviero la incluyera como beneficiaria en su testamento? Ninguno de orden sanguíneo. La relación se estableció en 1946, cuando el primer gobierno de Perón decidió modernizar la Flota Mercante del Estado. Compró la flota de la Compañía Dodero que, según la oposición, era una empresa en bancarrota.
Dodero falleció en 1951, y Evita un año después, El 25 de febrero de 1954, los herederos de Dodero hicieron donación a la sucesión de Eva Perón de dos inmuebles situados en las calles Gelly y Obes 1189 y Callao 1944, de la ciudad de Buenos Aires.4
- PERÓN JUAN DOMINGO, La fuerza es el derecho de las bestias,
Montevideo, Ediciones Cicerón, 1958, pag. 14.
2. FHASER NICHOLAS y NAVARRO MANYSA, Eva Perón, la verdad de un mito Buenos Aires, Editorial Bruguera, 1982.
3. Libro Negro de la Segunda Tiíania, Op. Cit.,pág. 44. Nota al pie.
4. Gueue Huoo, Historia de/Peronismo, Buenos Aires, Editorial
Planeta, 1999, Tomo, Pág.140.
Fuente Consultada: TODO ES HISTORIA NRO. 419 JUNIO/2002