Logia Lautaro Sociedad Secreta Objetivos de San Martin
Objetivos de la Logia Lautaro - Sociedad Secreta
Antecedentes:
En enero de 1812, San Martín se embarcó en la fragata George Canning (arriba, ese momento en un óleo de Norman A. Clarke), en compañía de Carlos de Alvear y de otros patriotas.
El 9 de marzo, la nave llegó a Buenos Aires, donde gobernaba el primer Triunvirato, que trataba de expandir la Revolución de 1810.
Alvear y San Martín fundaron una filial de la Logia de los Caballeros Racionales, que el Libertador rebautizó como Logia Lautaro.
Este nombre, fue tomado de un cacique araucano que en el siglo XVI se había sublevado contra los españoles y aludía, quizás a sus planes de liberación americana.
A principios de 1819, se fundó una filial de la Logia Lautaro en chile.
Este grupo intentó usar al Ejército Libertador para dirimir problemas internos, pero San Martín lo impidió.
LA LOGIA LAUTARO:
El 9 de marzo de 1812 llegó a Buenos Aires, procedente de Europa, un grupo de americanos entre los cuales figuraban José de San Martín y Carlos María de Alvear para ofrecer sus servicios al gobierno.
Vinculados a las logias de americanos que funcionaban en Cádiz y Londres, los recién llegados establecieron en Buenos Aires una entidad similar, la Logia Lautaro o de los Caballeros Racionales.
Esta institución secreta estuvo conectada con la Sociedad Patriótica y gravitó sobre todo en sectores ilustrados de la población y en el ejército.
Las reglamentaciones referentes a la organización de esta logia no han llegado a nosotros, pero es muy probable, que fueran similares a las de su filial chilena, ya que su constitución fue copiada por O’Higgins, quedando fundamentada en ella su verdadero objetivo: la independencia y la organización constitucional del país
OBJETIVO:
El objetivo de esta logia era lograr la independencia de América de los españoles, estableciendo un sistema republicano unitario y un gobierno unipersonal.
La primera filial de la Logia se fundó en Cádiz (España) en el año 1811, con el nombre de Logia Lautaro, en honor al caudillo mapuche llamado Lautaro, que llamó a su pueblo a sublevarse contra los conquistadores españoles de Chile en el siglo XVI.
Estaba inspirada en su organización en las logias masónicas, y en su inicio fue dirigida por José de Gurruchaga.
ESTATUTO DE LA LOGIA LAUTARO:
Gemía la América bajo la mas vergonzosa y humillante servidumbre, dominada con cetro de fierro por la España y por sus reyes, como es notorio al mundo entero, y lo han observado por tres siglos con justa indignación todas las naciones.
Llegó por fin el momento favorable en que disuelto el gobierno español por la prisión de su monarca, por sus observaciones repetidas, por la ocupación de la España, y por otras innumerables causas, la justicia, la razón y la necesidad demandaban imperiosamente el sacudimiento de este yugo.
Las provincias del Río de la Plata dieron la señal de libertad: se revolucionaron, han sostenido por diez años su empresa con heroica constancia; pero desgraciadamente sin sistema, sin combinación y casi sin otro designio que el que indicaban las circunstancias, los sucesos y los accidentes.
El resultado ha sido haber dado lugar a las querellas de los pueblos, al extravío de la opinión, al furor de los partidos y los intereses de la ambición, sin que los verdaderos amigos de la patria pudiesen oponer a estos gravísimos males otro remedio que su dolor y confusión.
Mucho se ha dicho y discutido se San Martín perteneció o no a la masonería. Algunos lo ponen en duda, otros lo niegan rotundamente. La masonería lo toma como uno de sus miembros, talvez para apropiarse de su prestigio, como lo han hecho también con Rosas distintos grupos y asociaciones de los más diversos signos políticos, tendencias y colores.
Este ha sido el motivo del establecimiento de esta sociedad, que debe componerse de caballeros americanos, que distinguidos por la liberalidad de las ideas y por el fervor de su patriótico celo, trabajen con sistema y plan en la independencia de la América y su felicidad, consagrando a este nobilísimo fin todas sus fuerzas, su influjo, sus facultades y talentos, sosteniéndose con fidelidad, obrando con honor y procediendo con justicia bajo la observancia de las siguientes constituciones:
1º La logia matriz se compondrá de trece caballeros, además del presidente, vicepresidente, dos secretarios, uno por la América del Norte y otro por la del. Sur, un orador y un maestro de ceremonias. [...].
2º El tratamiento del presidente y demás en la logia será de hermano, y fuera de ella el de Ud., llano, a excepción de los casos en que a presencia de otros el empleo y decoro público exijan el correspondiente tratamiento. No podrá ser admitido ningún español ó extranjero, ni mas eclesiástico que uno solo, aquel que se considere de mas importancia por su influjo y relaciones.
6º Tampoco podrán ser admitidos los hermanos ó parientes inmediatos.
7º Siempre que algún hermano fuese nombrado por el gobierno primero ó segundo jefe dé un ejército ó gobernador de alguna provincia, se le facultará para crear una sociedad subalterna, dependiendo de la matriz, cuyo número no excederá de cinco individuos, y entablando la debida correspondencia, por medio de los signos establecidos para comunicar todas las noticias y asuntos de importancia que ocurrieren. [...].
9º Siempre que alguno de los hermanos sea elegido para el supremo gobierno, no podrá deliberar cosa alguna de grave Importancia sin haber consultado el parecer de la logia, á no ser que la urgencia del negocio demande pronta providencia; en cuyo caso, des-pues de su resolución, dará cuenta en primera junta ó por medio de su secretario, siendo hermano, ó por el de la logia. [..].
Leyes Penales:
1º El que dejáre de asistir por mera voluntad, siendo muy frecuentes sus faltas, será declarado inhábil pare cualquier empleo por el tiempo que juzgue la logia, y en caso que lo tenga será suspenso hasta nueva resolución.
2º Todo hermano que revele el secreto de la existencia de la logia, ya sea por palabras ó por señales, será reo de muerte, por los medios que se halle por conveniente.
Estatuto de la Logia Lautaro, según copia de puño y letra de Bernardo O’Higgins.
PARA SABER MAS...
En los primeros días de marzo de 1812 desembarcó en Buenos Aires un grupo de americanos, entre los que destacaron José de San Martín y Carlos de Alvear.
Procedentes de España habían arribado previo paso por el Reinos Unido, y lo hicieron en la fragata inglesa George Canning.
Ese itinerario no era casual ni inocente, no podían navegar desde España al Plata; Inglaterra era un antiguo centro de conspiración de los americanos independentistas y los mismos intereses británicos venían a coincidir parcialmente, por sus propias razones, con los planes revolucionarios de los hispanoamericanos.
Así se había evidenciado en los años anteriores por los contactos de Francisco Miranda con el gobierno inglés y con personajes como el comodoro Home Popham.
Hacia 1800 el general escoses Sir Thomas Maitland había elaborado un plan para atacar el poder español en América del Sur que incluía el control previo de Buenos Aires y el ataque al Perú a través de Chile mediando un cruce militar de la Cordillera de los Andes.
El investigador Rodolfo H. Terragno que descubrió el original de dicho plan en un archivo de Edimburgo, expone como posible que San Martín haya conocido aquel proyecto a través de sus contactos ingleses o escoceses.
También es cierto que dicha; idea pudo deducirse de una inteligente lectura de los mapas de la época y nacer simultáneamente en varias cabezas.
Intensos y secretos lazos unían a los recién llegados con las logias secretas liberales que actuaban en Europa, vinculadas directa o indirectamente con la masonería, de cuyos ritos participaban.
Fundaron en Buenos Aires una filial de la Logia de los Caballeros Racionales, cuya meta principal era la independencia nacional y la organización constitucional del país.
(Según la historiadora Patricia Pasquali, el nombre de "Lautaro" habría surgido desde 1816 y no en sus orígenes en Cádiz ni en el momento de su instalación en el Plata, en 1812.).
Vinculada a la activa y pública Sociedad Patriótica seguidora del ideal morenista, la Logia ejerció fuerte influencia política hasta 1820.
Su existencia y actuación en el Plata fueron ya reveladas en el siglo pasado por las investigaciones de Bartolomé Mitre, quien escribió en su Historia de San Martín...:
"De 55 miembros que formaron parte de ella en aquella época cuatro fueron fundadores, a saber: San Martín, Alvear, Anchoris y Zapiola, que de ellos 24 eran del partido personal de Alvear y 13 de San Martín, que tres formaban parte del poder ejecutivo y 26 de la Asamblea Constituyente del año XIII..."
Esa división en "partidos", sus contradicciones y luchas internas demuestran, señalan los estudiosos, qué lejos estaba de tratarse de una organización monolítica que obedecía mandatos externos indiscutibles.
Al respecto, señala Patricia Pasquali: "La Logia de Buenos Aires se manejaba con total autonomía, tanto por su origen constitutivo como por su carácter de sociedad política..."
Fue una herramienta en la construcción del plan emancipadora escala americana.
Fuente Consultada: Historia Argentina Tomo I Desde La Prehistoria Hasta 1829.