Historia Origen de la Carretilla de Mano
Historia Origen de la Carretilla de Mano
Los orígenes y el desarrollo de la carretilla ocupan un lugar importante en la historia de los inventos, no porque en sí misma representara una innovación técnica valiosa, sino porque ilustra claramente un fenómeno de invención independiente.
Así, la carretilla no tiene un origen único, fue inventada en distintos lugares y en diferentes períodos de tiempo y se utilizó para finalidades también diversas.
Las formas más primitivas de la carretilla aparecieron en China poco tiempo antes del año 200, y su diseño se atribuye tradicionalmente a un general del ejército imperial, aunque esto probablemente sólo sea leyenda.
La forma de la carretilla china basta para suponer cómo se originó.
La única rueda es grande, frecuentemente de un metro de diámetro, o mayor, y por lo general tiene una docena de radios, o más; está situada entre las varas, a considerable distancia de la parte frontal, y el arcón o armazón de madera está construido a partir de esas varas, que encierran la mitad superior de la rueda.
De las varas salen unas plataformas que se proyectan sobre ambos lados.
Las cosas que habían de ser transportadas se cargaban sobre estas plataformas y la parte superior del arcón.
Si la carga se colocaba correctamente, no sólo se distribuía sobre ambos lados de la carretilla, sino que también equilibraba, por delante y detrás, el eje de la rueda.
Las formas más primitivas de la carretilla aparecieron en China poco tiempo antes del año 200.
De aquí que el peso de la carga fuese casi completamente soportado por ésta y el hombre que empujaba tenía que utilizar su energía solamente para hacerla mover y mantener su equilibrio.
Esta clase de carretilla parece que es la evolución de un carro de mano de dos ruedas, en el que, mediante una serie de modificaciones, el par de ruedas fue reemplazado por la única rueda central.
En muchas partes de China, sobre todo en las zonas húmedas donde se cultiva el arroz, los límites entre los campos frecuentemente sólo son unos terraplenes estrechos, la parte alta de los cuales sirve también como camino.
Por lo tanto, parece que esta carretilla fue una adaptación del carro de mano diseñado para circular a lo largo de esos angostos senderos.
Ciertamente, antiguas ilustraciones en las que aparecen estas carretillas chinas las muestran invariablemente empleadas para transportar vegetales y otros productos agrícolas.
En Europa, la carretilla fue claramente una derivación a partir de un tipo de artesa tirada por dos hombres.
En este aparato se introducía la carga en una caja de madera colocada entre un par de varas que sobresalían por delante y por detrás.
Entonces un hombre aguantaba el peso de la parte delantera, y otro, el de la trasera.
A veces, se equipaba este aparato con cuatro patas bastante gruesas, para que cuando los hombres empezasen a levantar la carga las empuñaduras ya quedaran bastante separadas del suelo.
Reemplazando el transportador delantero por una pequeña rueda, a menudo de no más de cuatro radios, se creó una forma de carretilla.
En las ilustraciones de algunos manuscritos aparecen juntos tanto la artesa soportada por dos hombres como la carretilla, con lo que se hace prerfectamente evidente la derivación de una forma a otra.
Parece que esta carretilla fue una adaptación del carro de mano diseñado para circular a lo largo de esos angostos senderos.
La carretilla europea parece haber sido diseñada hacia el siglo XII, y dichas ilustraciones muestran cómo se empleaba en los trabajos de construcción para llevar piedras y mortero de un sitio a otro.
Por lo que respecta a esto, su función era bastante diferente de la de la carretilla china, y también el des-plazamiento de la rueda hacia delante significa que los hombres que utilizaban esta carretilla europea tenían que levantar buena parte de la carga, además de empujarla y equilibrarla.
Era, por lo tanto, muy poco recomendable para el traslado de pesos en trayectos largos.
En siglos más recientes, los chinos, que a menudo recorrían grandes distan-cias con sus carretillas, utilizaban velas para ayudarse, aunque esto solamente era posible cuando el viento soplaba por detrás de ellos.
Por lo general, colocaban un par de pértigas verticales respecto de la carretilla, para hacerlas servir como mástiles, entre las cuales se desplegaba una vela cuadra de tela.
Se ha afirmado que esta práctica es casi tan vieja como la misma carretilla.
Es un hecho curioso el que los chinos nunca inventaran una carretilla como la empleada en Europa, la cual, a pesar de sus ineficiencias mecánicas, resultaba más conveniente en cuanto al uso.
A menudo, los chinos amarran un peso entre un par de cañas de bambú y lo transportan así entre dos porteadores.
Además, hacia el sigloVII, habían inventado un tipo de silla de manos que había nacido de la misma manera, aunque no se les ocurrió reemplazar al porteador delantero por una rueda.
Igualmente, los carros de mano se conocían en el occidente de Asia y en Europa hacia el 1000 a. de C, y existen rastros de su utilización, por ejemplo, por el ejército asirio, hacia el 600 a. de C.
Hasta el siglo XVII, cuando se estableció el contacto directo entre Europa y China, abierto por los mercaderes, cada zona tenía su propia y distinta forma de carretilla, si bien por esta época ya habían experimentado diversas modificaciones que servían a otras necesidades, diferentes a aquellas para las cuales habían sido diseñadas.
Ver: Palancas y Sus Aplicaciones
Ampliar: Física de las Carretilas