El Mayor Telescopio del Mundo: Historia de Monte Palomar
El Mayor Telescopio del Mundo: Monte Palomar
HISTORIA DE SU CONSTRUCCIÓN Y SUS CARACTERÍSTICAS
Monte Palomar se encuentra situado a 1677 m sobre el nivel del mar, en el condado de San Diego, California, a unos 1000 Km al SE de Monte Wilson, donde se encuentra otro de los mayores observatorios del mundo. Ambos observatorios están regidos en la actualidad por el mismo director, según acuerdo del Instituto Tecnológico de California, en Pasadena, y la Institución Carnegie en Washington.
Es fácilmente accesible y está muy alejado de las luces de Pasadena y de Los Angeles; la cúpula brillante y resplandeciente del gigantesco y potente observatorio es visible desde muy lejos.
Durante el día, esta gran cúpula, de 41 m de altura, permanece cerrada. Mas por la noche empieza a girar silenciosamente, se abre una ancha rendija, permitiendo ver un sinnúmero de tubos, portantes y tirantes. Empieza a trabajar el telescopio gigante del Monte Palomar. Con su famoso reflector de 5 metros, permite echar una mirada al espacio que alcanza a ver sistemas de estrellas a una distancia de miles de millones de años luz.
Con este gran telescopio, el mayor del mundo, se podría distinguir una vela encendida a una distancia de 30 000 kilómetros y fotografiarla a 50 000 Km, lo que puede dar una idea exacta del extraordinario alcance de este fabuloso telescopio.
Una de las ciencias más antiguas en el mundo es la astronomía; los egipcios hace más de 4000 años conocían el curso de los planetas, sabían que la Tierra giraba alrededor del Sol, tenían un calendario solar; los mayas también estaban interesados en gran manera por esta ciencia, conocían al igual que los egipcios los planetas y contaban con un calendario casi tan exacto como el nuestro.
Una empresa estadounidense empleó cuatro años para la realización del espejo {de 1931 a 1935), el cual fue transportado con un tren especial hasta Pasadena, donde se procesó ópticamente. El telescopio fue inaugurado en 1948, diez años después de la muerte de Hale, quien no pudo ver terminado su proyecto. Pero el telescopio de 5 m recibió su nombre. Edwin Hubble se hizo cargo de la supervisión científica de las operaciones del telescopio y, con él, midió las distancias de muchas galaxias, haciendo una clasificación de ellas y consiguiendo elaborar un mapa de la distribución de las galaxias del universo cercano.
No es de extrañar que todos los pueblos y en todas las épocas se interesaran por las observaciones siderales ya que es algo que lo tenemos siempre sobre nuestras cabezas; basta alzar la vista al cielo para querer, instantáneamente, horadar con nuestras casi ciegas pupilas, los secretos inconmensurables de los infinitos espacios siderales. Por esta razón la astronomía es una de las ciencias que más constantemente, pero lentamente, ha ido avanzando.
Cada año, gracias a los aparatos más modernos, se hacen descubrimientos más interesantes que van a enriquecer el libro de oro de la Astronomía, en el cual aún quedan por llenar una cantidad infinita de páginas, tan infinita como el cosmos mismo.
El telescopio astronómico es un invento relativamente reciente. Con los primeros telescopios del siglo XVII fue posible descubrir tres satélites de Júpiter e investigar las estrellas del sistema de la Vía Láctea. En el transcurso de los siglos se intentó construir telescopios de lente (refractores) cada vez mayores. Pero no pudo superarse el diámetro de objetivo de 1 m. Las lentes de este tamaño son difíciles de pulir.
Existe además el peligro de que se curven, ya que una vez ante el tubo del telescopio, se han de sostener solamente con su borde. Por ello ya se pensó pronto en aprovechar las facultades amplificadoras del espejo cóncavo. Así surgieron los telescopios de espejo (reflectores). Ya que los espejos no se sostienen por el borde, sino sobre toda su superficie, pudo intentarse el uso de diámetros mayores, construyendo con ello instrumentos cada vez más sensibles a la luz. En los Estados Unidos se fundió en 1901 un reflector de 60 cm.
En 1917 le siguió el primer reflector de 250 cm, el telescopio Hooker del observatorio del Monte Wilson. El director del Observatorio Wilson era en aquel entonces el astrofísico George Ellery Hale (1868-1939), quien se había hecho famoso, entre otras razones, por la demostración de la aparición de campos magnéticos relacionados con las manchas solares. Hale sugirió la construcción de un telescopio reflector de 7,5 m. Mas no se hizo y tuvo que contentarse con un reflector de 5 m. cuya construcción ya fue bastante difícil.
EL TELESCOPIO SCHMIDT: En el observatorio de Monte Palomar también se encuentra otro telescopio muy famoso: el Schmidt, de 1,22 m. Se trata de un telescopio especial, exclusivamente diseñado para la fotografía que, gracias a una configuración óptica particular, permite obtener imágenes de grandes zonas del cielo prácticamente sin defectos ópticos. Con este instrumento, el mayor en su género (instalado también en 1948), se ha realizado un gran adas fotográfico de todo el cielo visible desde Monte Palomar.
La Fundación Rockefeller dispuso para este fin seis millones de dólares. Aún no se tenía ninguna experiencia en la fundición de un espejo tan grande. La General Electric efectuó varias pruebas con cristal de cuarzo, en que se gastaron 639 000 dólares, sin llegar a un resultado satisfactorio. Entonces se interesó la fábrica de vidrio Corning en producir un espejo de Pyrex.
Empezaron con espejos más pequeños, aproximándose poco a poco al tamaño deseado. La primera fundición fracasó, porque el terrible calor de 1350° C inutilizó el molde. Tuvieron éxito en el segundo intento, el 2 de diciembre de 1934. El espejo tuvo que enfriarse durante ocho meses.
Después se llevó el disco de 20 toneladas a Pasadena, donde empezaron los difíciles trabajos para pulirlo. Mientras tanto se construía el observatorio sobre el Monte Palomar. La construcción continuó durante seis años ininterrumpidamente; la segunda guerra mundial interrumpió de momento su construcción; mas al cesar las hostilidades los trabajos continuaron su ritmo.
Trece años después de la fundición, en noviembre de 1947, pudo llevarse el espejo pulido a través de una carretera construida especialmente para este fin y montarlo en el observatorio. Fue inaugurado el día 3 de junio de 1948 y bautizado con el nombre de "Telescopio Hale" en honor del que había sido precursor de este gran telescopio, George Ellery Hale, que por desgracia no pudo verlo acabado.
La cúpula, en su parte inferior, consta de oficinas, cuartos oscuros fotográficos, refrigeradores para materiales fotográficos, biblioteca, cuarto de recreo, comedor para los astrónomos y almacenes. Las paredes de todos estos departamentos están aisladas con aluminio laminado, los cuartos oscuros tienen unidades individuales para acondicionamiento de aire y todos los demás cuartos tienen calefacción regulada por termostatos.
La construcción con doble pared de la sección inferior así como la de la cúpula protege el interior de la misma del calor absorbido por las paredes exteriores durante el día. Las paredes interiores están además aisladas con gruesas secciones de aluminio laminado, que mantienen el telescopio protegido tan cerca como es posible de las temperaturas nocturnas.
Las cortinas que cierran la rendija en la cúpula por la que el telescopio ve, se mantienen cerradas durante el día y se abren al atardecer en preparación de la noche de trabajo. En el segundo piso se encuentran tres piezas de equipo. Una son las bombas de aceite a alta presión y los filtros que envían el fluido a las pilas de aceite que mantienen el peso del telescopio (500 toneladas). Otra es una serie de tableros con controles electrónicos remotos y kilómetros de cables, que van desde los motores hasta las partes movibles del telescopio y cúpula.
No menos importantes son los osciladores de cuarzo que controlan la frecuencia de la corriente eléctrica usada por el "reloj", motor que mueve al telescopio de este a oeste durante la noche para compensar la rotación de la Tierra. El tercer piso tiene una superficie reforzada plana y está directamente bajo el telescopio. El telescopio sigue con toda ligereza los movimientos de las estrellas. Para ponerlo en movimiento basta un motor eléctrico de 60 watios.
En Monte Palomar existen además dos telescopios Schmidt de 45 y 120 cm, la abertura útil de su limbo corrector mide 123,75 cm y su espejo 183 cm de diámetro. El personal residente en este observatorio lo forman un intendente, un electricista en jefe, varios asistentes "de noche" que manejan los telescopios para los astrónomos y ayudantes, mecánicos, trabajadores de construcción y mantenimiento y sirvientes que mantienen la residencia en condiciones y preparan alimentos para todo el personal; las familias de este personal de operación viven en la montaña.
El personal puramente científico está dividido en dos grupos. El primero lo forman los científicos del Departamento de Astrofísica del Instituto Tecnológico de California y el segundo está en las oficinas de los observatorios de Monte Wilson y Palomar, a pocos kilómetros del Instituto.
Los astrónomos viven en Pasadena y van a Palomar solamente por cortos períodos, de dos a diez días, entonces son relevados por otros y regresan a Pasadena.
La pieza de cristal más grande del mundo: La fabricación de lentes y espejos telescópicos, figura entre los trabajos más difíciles de la industria del cristal, por la perfección, homogeneidad y características especiales que debe tener, desde un principio, la masa vitrea que habrá de someterse a las delicadísimas operaciones que harán de ella un instrumento de precisión astronómica.
Hay espejos telescópicos de grandes dimensiones y de varias toneladas de peso; pero la pieza más grande de cristal que existe en el mundo, es el espejo que se fabricó para el telescopio del observatorio de Monte Palomar, en California, Estados Unidos de América. Los detalles de su fabricación constituyen una demostración de lo que pueden la ciencia y la industria cuando se unen para llevar a cabo un proyecto gigantesco.
En 1928 las Fundaciones de Rockefeller y Carnegie aportaron los fondos necesarios para la construcción de un telescopio que tuviera un espejo de cinco metros de diámetro. En los cálculos previos y en las operaciones preliminares, se invirtieron varios años, hasta que el 2 de diciembre de 1934, se terminó la fundición de un bloque de cristal que tenía 510.54 centímetros de diámetro, 66 centímetros de grueso y 20 toneladas de peso.
El cristal es de borosilicato especial, fundido primero en un horno continuo y pasado luego a otro horno que contenía el molde, habiéndose hecho el temple en un horno eléctrico. Las operaciones de fundición y enfriamiento se llevaron a cabo en los años de 1934 y 1935, en las grandes fábricas de vidrio de Corning, en el estado de Nueva York.
El bloque de cristal tiene forma de disco. Su cara superior es lisa y la inferior en forma de parrilla científicamente calculada para eliminar peso y permitir la utilización de soportes múltiples en el interior del bloque, en el plano de centro de gravedad, evitando En 1936 se envió el disco a los talleres ópticos que tiene en Pasadena el Instituto Tecnológico de California, donde se montó en un torno especial para trabajar y pulir su superficie, dándole una curvatura paraboloide que no tuviera un error que excediera de dos millonésimas de pulgada.
Durante once años se trabajó en esa operación que se terminó el 4 de octubre de 1947, y el disco se trasladó al edificio del observatorio astronómico en Monte Palomar, a unos cien kilómetros al norte de San Diego de California, donde la superficie paraboloide se recubrió con una película de aluminio vaporizado que la transformó en un espejo.
Finalmente, el 3 de junio de 1948, después de veinte años de estudios y trabajos, fué inaugurado el telescopio, en cuya parte inferior descansa el gigantesco espejo, apoyado en 36 dispositivos
complicados. La estructura metálica del telescopio tiene más de 20 metros de altura, con un peso de 500 toneladas, y el edificio que lo alberga, construido de acero y concreto, se eleva a una altura equivalente a doce pisos, y está rematado por un domo giratorio de 41 metros de diámetro. En 1949 y 1950 continuaron los trabajos de corrección y afinación de la superficie del espejo y el ajuste y comprobación de los delicados mecanismos que rigen y mueven todas las piezas y dispositivos del colosal telescopio.
La potencia del espejo para penetrar en los espacios estelares es tal, que alcanza hasta una distancia que se mide en mil millones de años luz, o sea el doble de la del telescopio de Monte Wilson que le sigue en importancia. Una idea de esa potencia nos la da el hecho de que, en completa oscuridad, el ojo humano puede distinguir la luz de una vela a unos veinticinco kilómetros de distancia, mientras que un astrónomo, valiéndose del telescopio de Monte Palomar podría distinguirla a 25.000 kilómetros, y si en vez del ojo del astrónomo se adapta al telescopio un aparato fotográfico, la placa fotográfica podría registrar esa misma y débil luz a 65.000 kilómetros de distancia.
Ver Tabla Con Los Más Grande Telescopios del Mundo
IMPORTANTE ACLARACIÓN:
Se aprobó la construcción de un nuevo y gran telescopio, que será el mas grande del mundo.
El Consejo del Observatorio Europeo Austral (ESO) ha aprobado la construcción del European Extremely Large Telescope (E-ELT), el mayor telescopio del mundo. Tendrá un coste aproximado de 1.000 millones de euros y no entrará en funcionamiento hasta dentro de diez años. Su emplazamiento final estará situado en Cerro Armazones, en el Desierto de Atacama (Chile), a sólo 20 kilómetros de distancia del Very Large Telescope. El E-ELT será un telescopio óptico infrarrojo que tendrá una apertura de 39 metros y permitirá caracterizar exoplanetas con masas similares a la Tierra, estudiar poblaciones estelares en galaxias cercanas y realizar observaciones ultra-sensibles del universo profundo.
Fuente Consultada:
Las Grandes Maravillas del Mundo Fasciculo N°8